Música electrónica en Chile

•  Se siente el nuevo sudor mixturado con la experiencia de los que ya están en esta dinámica creadora desde hace por lo menos màs de 20 años.

  Articulo escrito por Máximo Campos para la web Nación Eléctrica el año 2018 con el título «Cambio de piel de la música electrónica chilena» – Revisado y Actualizado para Ciudad Sonora 2019. Foto de portada – MC

CAMBIO DE PIEL

– En lo profundo de esta franja de tierra, se puede lograr reconocer un montón de talentos desarrollados en diferentes medios de expresión artística y En cuanto a la música electrónica no estamos lejos, en este tiempo podemos asegurar que la mayoría de los proyectos más interesantes y suspicaces viven y se desarrollan en el camino amarillo que transita por debajo del sonido local, la resistencia, la lucha o más conocido como underground, que busca en la matemática de las ondas sonoras, el significado de las emociones auditivas donde subsisten dentro de una economía cultural que no nos hace justicia, aún podemos hacer el ejercicio de comparar variadas letras de canciones de artistas escritas a mitad del siglo pasado como es el caso de Violeta Parra, Víctor Jara o ya más “actual” en los 80 con los Prisioneros y nos damos cuenta que calzan a la perfección, los mismos disgustos, problemáticas culturales del cual tampoco pudo zafar el sonido electrónico, pero aun así, con toda esta corriente en contra, el estilo electro, es hoy en día más saludable y fructífero.

En Chile se comienza a gestar esta historia, de la mano del ingeniero civil José Vicente Asuar que da pie a sus investigaciones en el campo de la composición musical utilizando su ingenio y motivación, logrando ser uno de los creadores fundamentales en el campo de la música electroacústica en Chile y Latinoamérica, además ser reconocido ampliamente en Europa. Su obra referencial, «Variaciones espectrales» creada en el año 1959, es la primera obra creada ciento por ciento a través de dispositivos electrónicos según cuentan expertos e investigadores.  Es además el padre del primer “Computador” dedicado a replicar sonidos con base electrónica en América latina, el cual bautiza con el nombre Comdasuar en el año 1978. Junto con ese gran invento y visión avanza una tremenda historia que se sigue escribiendo sin descanso hasta la actualidad, pero, por el momento dejaremos la historia de Asuar hasta acá y nos centraremos en lo actual, lo pronto, una vuelta de tuerca y lo que sigue en el avance en la música electrónica y sus diferentes estilos, con sonidos análogos y el uso de software, siendo estos parte de la nueva generación de productores que vienen con un legado de casi 60 años, donde gracias a esa historia decimos con seguridad que la música electrónica en Chile no es nueva.

José Vicente Asuar y el Comdasuar

El sonido oculto

Sin rodeos aseguramos que  el movimiento más fructífero y sano en la música contemporánea, es la que presenta el movimiento underground, oculto de los ojos y oídos populares. En esto también incluimos programas de radio y diferentes documentales que transitan en esta senda, no por que se quisiera así, si no por el poco interés de parte de los medios masivos y el no reconocimiento de la masa popular. Pero ¿cuál es el precio que deberíamos pagar si todo este movimiento electrónico hubiese alcanzado la fama, logrando convertirse en mainstream? Capaz que hasta Raphael de España hubiese sido fan de Gozne o quizás habríamos visto al grupo de bailarines del programa Mekano danzar al ritmo de Valesuchi, cosa que no sabremos jamás. Pero junto con esta reflexión es quizás el motivo por el cual el desarrollo cultural en la sombra masiva es más sana, ya que se maneja sin prejuicios, se disfruta y se discute viendo lo que cuesta desarrollarse en este ámbito, el movilizarse con maquinas, vinilos, maletas y cables en la locomoción colectiva, el crear un evento que funcione, el tocar gratis y un largo etc hace de esta escena algo digno de documentar y de creer en ella, mas allá de la pasión, el increíble talento, las generosas propuestas de proyectos y eventos que se generan de lunes a domingo sin parar, en Santiago y el resto del paÍs.

Un catálogo propio

Llegando la etapa del DJ  en los 90, donde el foco se centró en mezclar bien y mostrar un nuevo ritmo a esta opaca sociedad recién salida de la oscura dictadura, donde en ese entonces se desarrollaban los sonidos más ligados al Punk con Fiskales-Ad-Hok, los Miserables, Bbs paranoicos y El Hip-hop estaba tomando un nuevo rumbo más Soul con Tiro de Gracia, el rescate de la «chilenidad» con Los Tres y entre esa mezcolanza de ideas,  de tratar de darle identidad a una cultura que tenia ganas de unir los sentimientos, volvían los hijos de exiliados de la dictadura chilena a presentar lo aprendido y vivido en tierras lejanas, algunos de Berlín a Santiago, donde se da a conocer esta refrescante propuesta eléctrica que a muchos abrió los ojos y permitió el desarrollo del Dj nacional, pero también ocasiono una pésima gestión de los medios masivos adolescentes como el programa Extra-jovenes, que confundió el estilo Eurodance con Techno creando un nicho popular electrónico errado en cuanto a estilos.

A mitad del folio pasado recién se estaba conociendo medios facilistas como el internet de manera mas masiva, ahora, en el presente, el cambio de piel se vive con la producción. Lo interesante es saber qué se hace con las nuevas tecnologías más que saber el cómo, si bien la escena Dj es la más conocida para la gente que no está enteramente ligada al sonido electrónico, destacamos la perseverancia de los músicos que crean sus propias propuestas, Es por eso que nos llama la atención dentro de “lo nuevo” el proyecto de Simone Corbalán llamado Ochi que, con solo 19 años, comenzó a producir de manera más seria, si bien con anterioridad compuso y dirigió algunos track junto a Rodrigo Morris que en ese entonces se desempeñaba como su profesor. Ochi se desliza sin pudor por diferentes estilos como el synth trap con tintes pop y el ambient melancólico. Nos demuestra que las nuevas generaciones no tienen miedo a la producción y al mestizaje de estilos. Si se piensa que ya esta todo hecho se desecha y se comienza otra vez, como siempre lo supo hacer la naturaleza.

OCHI

Otro caso interesante de presentar es el trabajo del colectivo nacional Away team, el cual funcionaba como enjambre de creadores jóvenes los cuales no se conforman solo con la producción y nuevas búsquedas sonoras, si no que trabajan además por mantener una escena vigente con eventos por doquier manteniendo su actividad varias veces al mes desde hace ya un tiempo, si bien el colectivo ya no funciona bajo el nombre de Away Team los mismos integrantes decidieron mutarlo y expandirlo eliminando el concepto de grupo, ellos sieguen funcionando de la misma manera pero sin ese techo del “nombre y apellido”. Actualmente ellos son los mas jóvenes activistas electrónicos nacionales, con una nueva mirada tratando de dejar de lado los prejuicios, aprendiendo y sabiendo compartir el nuevo sudor mixturado con la experiencia de los que ya están en esta dinámica creadora desde hace por lo menos mas de 20 años.

-Logo Away Team-

Con un sinfín de especialidades e investigaciones, reconocemos la idea de encontrar un sonido característico personal con olor local, que seguramente será marcada con el avance del tiempo dentro de esta materia ligada al sonido extranjero. Pero no nos equivoquemos al creer que toda la historia de la música electrónica se escribe ‘afuera’. En este país, que parece un ají, también tenemos historia y un color particularmente picante. Como dijo alguna vez Jorge González: “sangre latina necesita el mundo – roja, furiosa y adolescente”.

Por Máximo Campos